[REPUBLICADO] COMUNEROS RECHAZAN SOCIALIZACION PARA AMPLIAR MINERÍA EN INTAG

Con fecha de 8 de enero del 2019, moradores y moradoras de las comunidades de Villaflora, Cerro Pelado y Barcelona, reunidos en el complejo Turístico de Nangulví con la presencia de la Defensora del Pueblo de Imbabura, hicieron conocer al público inteño y al mundo entero, su rechazo al proceso de socialización del Estudio Complementario de Impacto Ambiental y Plan de Manejo Ambiental, con el cual se pretende legitimar la ampliación del proyecto Minero LLURIMAGUA, en la zona de Intag.

 

El proceso de socialización incluye mesas de información en comunidades aledañas al proyecto minero Llurimagua y Asambleas, las cuales cierran sus puertas este domingo 13 de enero en Intag.

 

En dichos espacios se socializa un documento de 1.500 páginas, el cual esta repleto de términos técnicos e información extremadamente compleja. El Ministerio del Ambiente dio tan solo 15 días para recibir comentarios del público, cuando legalmente podrían haber permitido 30. Las oficinas se mantienen abiertas en las comunidades dentro del área de influencia del proyecto solo tres días, donde los moradores no pueden acceder a una copia impresa, sino solo a una versión digital; cuando es de conocimiento público que muy pocas personas tienen computadoras en sus hogares.

 

En su rechazo, los moradores afirman que antes de considerar la ampliación del proyecto minero a otras 701 hectáreas en las parroquias de Peñaherrera y García Moreno, que primero se debe solucionar los problemas ambientales y sociales suscitados durante la primera etapa del proyecto Llurimagua; incluyendo la contaminación de fuentes de agua, tala indiscriminada; conflictos sociales, uso indebido de madera del bosque, entre muchos otros impactos, causado por un proyecto impuesto violentamente en tiempos del ex presidente, Rafael Correa. Señalan los moradores que el plazo para estudiar el voluminoso Estudio de Impacto es irrisorio y que por lo ante señalado, piden que suspenda la socialización del proyecto minero, resaltando que la verdadera riqueza de INTAG es el agua y la tierra. Por último, exigieron que se respete su derecho Constitucional de vivir en una cultura de Paz.

 

Tanto los comuneros de las comunidades aledañas al proyecto minero como la DECOIN, estamos muy preocupados por la falsa imagen de apoyo al proyecto minero que empleados de la dos empresas, Emsaec y Enami, están creando. La empresa ha dicho una y otra vez que solo si le otorgan el permiso para seguir explorando podrán emplear a las decenas de inteños que fueron despedidos en las últimas semanas. Muchos de los presidentes de las comunidades del sector, también son actuales empleados de las empresas, o esperan su reincorporación al trabajo. Para proteger sus mensuales algunos empleados están movilizando a decenas de personas para que visiten los centros de información y firmen en apoyo a la expansión, sin siquiera haber leído una sola página del estudio. Dicha movilización, motivada por la avaricia, puede llevar a confrontaciones.

 

Como organización ambientalista que trabaja en Intag desde 1995, hemos tenido tiempo para darle un rápido vistazo al Estudio de Impacto Ambiental, y aún con la presión del tiempo, podemos afirmar categóricamente la ampliación propuesta de la exploración avanzada generará gravísimos impactos sociales y ambientales. Señalamos que el documento basa algunos impactos en información deficiente y frecuentemente errónea. Para mencionar solo algunas de nuestras preocupaciones; la ampliación tiene previsto ejecutar 160 nuevas perforaciones en una zona rica en bosque primario y secundario, donde los propios científicos identificaron dos especies de animales en peligro crítico de extinción- incluyendo al mono araña cabeza marrón, además de muchos otros incluidos en las Listas Roja del Ecuador y de la UICN. Adicionalmente, en dicho bosque los investigadores del Instituto Nacional de Patrimonio Cultural identificaron decenas de sitios conteniendo vestigios arqueológicos preincaicos. Por otra parte, se prevé construir 100 senderos, y las actividades contaminarán el aire, suelo y agua, y podrían afectar la propiedad de aproximadamente 55 propietarios. Las perforadoras, además, consumirán entre 5.000 y 8.000 litros de diésel, y 54.000 litros de agua al día.

 

Nuestra organización se une a los pedidos de los moradores que defienden su derecho a vivir en paz y libre de contaminación, y rechazamos tanto la manipulación de los empleados, como la ampliación del desastre ambiental conocido como Llurimagua.

 

DECOIN/ Defensa y Conservación Ecológica de Intag

decointag@gmail.com

 

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